
Un informe de Aresep advierte sobre antigüedad, falta de mantenimiento y deficiencias en los repuestos como causas principales.
Al menos cuatro de cada diez buses que se incendiaron durante el 2024 estaban al límite o superaban la vida útil permitida por ley, según reveló una investigación especial de la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep).

El análisis abarcó los 14 casos de autobuses incendiados reportados durante el año anterior y se basó en datos suministrados por el Benemérito Cuerpo de Bomberos. El objetivo fue identificar las causas de los siniestros y proponer acciones correctivas para las empresas concesionarias de transporte público.

El informe detalló que la mayoría de los incidentes involucraron buses que comenzaron a operar entre 2008 y 2011, es decir, unidades con más de 15 años de servicio, cuando el límite legal es precisamente ese. En algunos casos, los vehículos tenían más de 20 años en funcionamiento.
Empresas reincidentes y poca fiscalización interna
Los 14 incidentes se concentraron en solo 11 empresas operadoras, según los registros de Aresep. El informe clasificó estas empresas según el tamaño de su flotilla:
- 55% son grandes (más de 35 unidades)
- 27% medianas (16 a 35 unidades)
- 18% pequeñas o microempresas (menos de 16 unidades)
Otro hallazgo preocupante fue que en un 37% de los casos no se pudo comprobar si los choferes contaban con licencia o permisos vigentes. Además, aunque en la mayoría de las empresas los conductores sí reportan fallas mecánicas, dos de ellas no tienen ningún protocolo para registrar problemas en las unidades.
Reglamento preventivo
Como respuesta, Aresep lanzó un nuevo reglamento preventivo contra incendios, dirigido a las empresas concesionarias de autobuses. Este documento contiene lineamientos para reforzar el mantenimiento de las unidades, actualizar modelos, capacitar al personal y resguardar la seguridad de los pasajeros.
La institución también realizó inspecciones conjuntas con la Intendencia de Energía para evaluar el estado del combustible utilizado en las unidades afectadas.